domingo, 6 de septiembre de 2009

Inicio de curso

Como cada inicio de curso, este año me planteo nuevos retos y me pongo como meta aprender nuevas cosas que me faciliten mi tarea. Desde hace bastante tiempo comienzo cada curso con la ilusión de probar nuevas cosas, de llevar a la práctica ideas que se me han ocurrido, de plantearme formas de responder a los problemas que todos los docentes nos encontramos,...


En cursos pasados me ha interesado ajustar la programación de la asignatura a las características del centro, alumnado,... Otro año me interesó conocer maneras de abordar y paliar el absentismo escolar, o también fomentar el uso de los ordenadores en mis clases, usar un portafolios para la documentación de los proyectos que se construyen, analizar la opinión del alumnado acerca de la manera de dar la clase, encontrar maneras de atender a la diversidad,...

Yo soy un sencillo profesor que, con esos retos anuales, no pretende conocer mejor la enseñanza ni encontrar hechos novedosos, mi énfasis lo pongo en algo más práctico y cercano, intento mejorar profesionalmente, en algún campo que observo me preocupa. Honestamente debo decir que con ellos aprendo a llevar mejor mis clases, sin considerar que deba servirle a alguién más.

Este año me interesa más analizar cómo conseguir que mi alumnado tenga mayor creatividad, que se implique en mayor grado en los proyectos que realizan, en definitiva en aprender por qué hay proyectos que les enganchan mayoritariamente mientras en otras ocasiones no. Trabajar su motivación, conocer mejor sus intereses y los del entorno de mi centro,... ¿cómo desde la tecnología puedo resolver mejor los problemas y necesidades que éste tiene?

Para ir aprendiendo de los diferentes temas he utilizado diversas técnicas: desde un diario del profesor (nunca enfatizo lo suficiente la lectura de Diarios de Clase de Miguel Ángel Zabala), la confección de cuestionarios para el alumnado y el profesorado buscando una triangulación, la investigación-acción, el registro en vídeo de mis propias clases, solicitar a compañeros-as que actúen de observadores,... Todos con una idea eminentemente prácticas que mejore mi manera de dar clase.

Para aprender más acerca de la motivación de mi alumnado, de fomentar su creatividad, utilizaré un método muy heurístico basado en la investigación-acción de Jack Whitehead. Ya veremos qué conclusiones saco. No obstante lo principal no creo siquiera que sea este nuevo reto sino más bien acorde a lo que escribe Fernando Trujillo en su blog, empezar el curso de nuevo con ilusión.

¿Y tú qué ilusionante reto te pones este año?